Tal vez te pueda parecer que las mesillas al ser un mueble auxiliar no jueguen un gran papel en tu habitación, pero… es todo lo contrario. Son una pieza clave tanto por su papel decorativo como por su utilidad práctica.

Contar con una superficie, junto a la cama se nos hace imprescindible. Que sería de nuestras gafas, despertadores, libros… 

  

Lo habitual es elegir este mueble auxiliar a juego y de dos en dos. ¿Y si le damos una vuelta a esta elección y pensamos en combinar modelos diferentes? Puede ser todo un acierto tomar esta decisión, eso sí, teniendo en cuanta unas claves que os detallamos a continuación.

Las mesillas de noche diferentes, bien escogidas, son todo un éxito.

La diversidad de formas.

Es perfecto, por ejemplo, poner un modelo de líneas rectas y otro de formas redondeadas: será una combinación perfecta.

Materiales diferentes.

Mezclando madera y metal conseguirás aportar texturas al dormitorio. 

También puedes optar por elegir dos tipos de metal o dos tipos de madera diferente.

Los opuestos.

Siempre se dice que los polos opuestos se atraen, pues en este caso también sucede. 

Elegir un elemento y su contrario cuando se trata de parejas decorativas no es una locura, es un acierto.

Por ejemplo, si te decides por una muy voluminosa está bien colocar al otro lado de la cama un modelo más ligero y de menor tamaño.

Elementos claves y especiales.

Merece la pena que le dediques un poco de tiempo a la selección de una de ellas.

Piensa en ella como un elemento clave, y que este destaque por su; originalidad, diseño, atractivo…. 

Otra, manera de crear ambos lados de la cama de una manera diferente. 

Si tienes un dormitorio amplio una idea genial muy adecuada para estos espacios, es la combinación de mesilla con silla o butaca.  

También pueden ser banquetas, estanterías o baldas fijas.

No te olvides de…

Cuando hablamos de elegir mesillas de noche distintas para colocar a ambos lados de la cama no nos referimos a escogerlas sin criterio, al tuntún, de forma que sean muy diferentes y listo. En absoluto.

Las mesillas de noche que no son idénticas, pero si están bien combinadas, siempre tienen algo en común. 

Pueden compartir solamente la forma, los materiales o el estilo, pero será suficiente para que tengan un nexo, que hará que se complementen. 

 

La clave está en hacer y elegir las cosas con una razón de ser.

Y tampoco te olvides de…

Cuando estés pensando en elegir las mesillas que más te convienen, las prefieras iguales o diferentes, plantéate si están en armonía con tu cama o no.

Si tu cama no tiene cabecero o uno muy sencillito, podrás optar por mesillas más originales y con un mayor peso visual. 

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